El Gobierno regional ha fracasado en su intento de ampliar las restricciones al desarrollo urbanístico en los municipios del entorno del Mar Menor. El decreto ley que presentó el consejero de Fomento en funciones, José Ramón Díez de Revenga, ha sido tumbado este viernes por los votos en contra del PSOE, Podemos y Vox en la Diputación Permanente de la Asamblea Regional.
Los partidos de la oposición han criticado que el decreto ley suponía una modificación encubierta de la Ley del Mar Menor aprobada en julio de 2020, que establecía una moratoria urbanística de tres años mientras se elaboraba la Estrategia de Ordenación del Mar Menor. Según han denunciado, el decreto ley permitía nuevas construcciones en zonas sensibles como Los Belones y La Manga, lo que suponía una amenaza para la recuperación de la laguna salada.
El consejero de Fomento ha defendido que el decreto ley prorrogaría las limitaciones al crecimiento urbanístico en la laguna salada, y solo pretendía evitar el estrangulamiento de los cascos urbanos y facilitar pequeñas actuaciones que no afectaran al medio ambiente. Ha reconocido que la Estrategia de Ordenación no se ha podido elaborar en el plazo previsto por su complejidad técnica y ha pedido más tiempo para consensuarla con los agentes sociales.
El rechazo al decreto ley evidencia las dificultades que tiene el Gobierno regional para sacar adelante sus iniciativas legislativas sin contar con mayoría absoluta en la Asamblea. Además, pone en duda el apoyo de Vox a la investidura del presidente en funciones, Fernando López Miras, cuyo plazo termina el próximo jueves. Si no se logra un acuerdo, habrá que convocar nuevas elecciones autonómicas el 25 de octubre.
