Una vez más, se cumple el tópico de que, en el mundo del fútbol, la cuerda se rompe siempre por el lado más débil. Y el que asegura que es más fácil echar al entrenador que a veintitantos jugadores. Así pues, el FC Cartagena ha anunciado este sábado el despido del técnico Víctor Sánchez del Amo, después de que el equipo arrancase la liga con seis derrotas (la última, este viernes, frente al Eibar en casa por 1-2) y tan solo una victoria. Tres puntos de veintiuno posibles.
Lo cierto es que las circunstancias no han ayudado al preparador madrileño, quien llegaba a un Efesé que afrontaba una temporada de fuertes restricciones económicas tras años en los que la directiva hizo un esfuerzo para soñar con la zona de ascenso. Este año, al contrario, toca ajustarse el cinturón y buscar la permanencia con una plantilla mucho más barata que la de los años anteriores. Hace unos días, LaLiga publicaba los límites salariales de todos los equipos de Primera y Segunda, y el Efesé es de los que menos dinero dispone: apenas 5,2 millones frente a los 23,9 del Elche, los 16 del Valladolid o los 11 del Eibar.
Precisamente por ello, el equipo esperó 'saldos' de última hora y buena parte de los fichajes llegaron a pocos días del cierre del mercado, algo que provocó la intranquilidad de la afición e impidió a jugadores llamados a ser importantes a realizar la pretemporada en condiciones normales.
Además, algunas de las decisiones que ha adoptado Víctor en sus alineaciones, también con los cambios durante los partidos, y sobre todo su escasa capacidad de autocrítica en la sala de prensa y capacidad de reacción para adoptar variantes tampoco han ayudado a su continuidad.
MAL ARRANQUE
Con estos mimbres, la temporada comenzó con el pesimismo instalado en el ambiente, que se confirmó en las primeras jornadas, con derrotas en casa ante el recién ascendido Eldense (0-1), el Andorra (3-2) y el Levante (0-1). La victoria fuera de casa ante el Villarreal B (1-2) fue un espejismo antes de la sucesión de derrotas ante el Zaragoza (1-3), Valladolid (1-0) y este viernes ante el Eibar (1-2), que han sentenciado al técnico, junto a su equipo de trabajo formado por Giannis Kontoes y Koke Contreras.
Ahora, el núcleo duro de la directiva albinegra, capitaneado por Paco Belmonte y Manolo Sánchez Breis, buscarán un nuevo técnico que sea capaz de trabajar con un equipo que parece que tiene (al menos hasta el momento) importantes carencias, especialmente en la zona defensiva. Paralelamente, habrá que empezar a 'peinar' el mercado en busca de algún refuerzo que se pueda incorporar de manera inmediata o ya en el mercado de invierno.
CALENDARIO MÁS FAVORABLE
Entre los elementos que invitan al optimismo, está el calendario, pues el Efesé ya se ha enfrentado a duros rivales como el propio Eibar, el Zaragoza, el Levante o el Valladolid, y los próximos partidos son frente a rivales más 'de su liga': en las próximas seis jornadas -quitando al Espanyol- tendrá que enfrentarse al Amorebieta, al Racing de Ferrol, al Racing de Santander, al Alcorcón, al Mirandés y al Leganés, equipos que parecen más propicios para iniciar una hipotética remontada.
También parecen invitar al optimismo los destellos dejados por algunso futbolistas como Umaro Embaló, Arnau Solà o el canterano Iván Ayllón, piedras sobre las que edificar el nuevo proyecto.
