Situación surrealista la que vivieron unos agentes de la Policía Nacional en Murcia. Salvaron la vida a un hombre, marroquí de 28 años, que se estaba desangrando en plena calle por la noche. Tras hacerle un torniquete para cortar la hemorragia, se percataron de que esos cortes se los había hecho él mismo al romper una ventana de una nave en la que acababa de entrar a robar. Tras ponerle a salvo, detuvieron al individuo.
Los hechos ocurrieron en la carretera de Santa Catalina, en Murcia. Una alarma comenzó a sonar en una nave industrial, por lo que la Policía Nacional acudió al lugar. Próximos a la nave, se encontraron con el ahora detenido, desorientado y con varios cortes importantes en el brazo, por los que brotaba una gran cantidad de sangre.
Los agentes hicieron lo que pudieron para salvarle la vida, y después de varios intentos de taponar la herida, optaron por el torniquete. Mientras le practicaban el salvamento, otros agentes acudían a la nave asaltada, comprobando que había una ventana rota con restos de sangre, que evidenciaban lo ocurrido.
Tras atar cabos, los agentes procedieron a detener al individuo, que posee multitud de antecedentes por hechos similares
