El granizo, de hasta 30 centímetros, caído en las últimas horas en el Valle del Guadalentín ha causado un gran daño en los cultivos, especialmente de sandía, que estaban a punto de ser recogidas. También otros de col o alcachofas.
Además, el peso del hielo caído ha provocado daños en invernaderos. El presidente López Miras ha visitado la zona, y ha anunciado que el Gobierno autonómico pedirá inmediatamente la declaración de zona catastrófica.
En Mazarrón, las precipitaciones no han causado daño a los cultivos de tomate, que también están a punto de ser recogidos. Allí los agricultores han tenido más suerte que los lorquinos, y la lluvia ha sido bien recibida.