Hechuras

Los jugadores del Real Murcia celebran la victoria en Granada
Los jugadores del Real Murcia celebran la victoria en Granada

Nadie recordará en apenas 3 semanas que el equipo estuvo sometido, que lo pasó mal y que nos tuvo más de una hora preocupados. Solo los tres puntos y la grada, esa nueva exhibición y los más avezados sí que retendrán que se lograron con remontada en los últimos minutos. Nada más.

Hablar de lo la afición no puede ser reiterativo. Así que insistiremos cuantas veces sea necesario. Y lo ayer, primera jornada de Liga, mes de agosto, es de locos. Esto ayuda al equipo, qué duda cabe. Pero también mete miedo al resto de rivales: un gigante enjaulado en una categoría que se le queda pequeña.

Pero que el equipo aprenda a sufrir, a recibir curas de humildad como la de casi todo el partido, le ayudará a hacerse fuerte en sus virtudes: calidad y precisión. Con eso bastará. El equipo no tiene ni por qué jugar bien ni por qué avasallar a sus rivales. Tiene que ser letal. Como ayer en Los Cármenes de Granada