El tenista murciano Carlos Alcaraz perdió la final del Río Open, celebrado en Río de Janeiro (Brasil) durante los últimos días. El murciano cayó (7-5, 4-6 y 5-7) frente al inglés Cameron Norrie en la final del torneo, y no pudo revalidar el título logrado en 2022, que le convirtió en el ganador más joven de la historia del ATP 500 brasileño.
El murciano estuvo mermado desde el ecuador del segundo set por unos problemas en su cuádriceps derecho, lo que permitió a Norrie remontar tras haberse hecho el murciano con el primer set.
Antes de perder frente a Norrie, el tenis de El Palmar se deshizo por el camino del brasileño Mateus Alves en dieciseisavos de final, del italiano Fabio Fognini en octavos, del serbio Dušan Lajović en cuartos, y del chileno Nicolás Jarry en la semifinal.
Alcaraz, que se mantiene como número dos del mundo perdió por segunda vez en su carrera ante Norrie (actual 13º en el ránking ATP), al que ha ganado cuatro veces. De hecho, ya le derrotó el domingo pasado en la final del ATP 250 de Buenos Aires, Argentina.
Pese a la derrota, el murciano demuestra, con su segundo título en siete días, estar dando los pasos correctos tras las dos lesiones consecutivas que le impidieron jugar en el Abierto de Australia y le despojaron del número uno que ya vuelve a tocar con la yema de los dedos.
Fue un partido igualadísimo que pudo ganar cualquiera. Para hacerse con la primera manga, tuvo que sudar sangre, y Norrie le llevó al desempate (7-5). La igualdad también fue la tónica dominante de la segunda manga, a la que se llegó con un 4-4 que finalmente se decantó del lado inglés (4-6).
En el tercer set, Carlitos se vio muy mermado por la lesión, prácticamente cojo en algunos momentos. Simplemente haber terminado el partido ya da muestras de la gran clase que atesora el palmareño. Al final, 5-7 para el inglés.
