En la madrugada de este miércoles se ha registrado un tiroteo mortal en una gasolinera de las afueras de Burgos. Un policía nacional de 46 años ha fallecido en el enfrentamiento con agentes de la Guardia Civil que lo perseguían después de haber robado el arma de otro oficial en su lugar de trabajo en Galicia.
El individuo armado se encontraba en su vehículo cuando fue avistado por la Guardia Civil, quienes intentaron detenerlo. Sin embargo, el sospechoso se dio a la fuga y se dirigió hacia la gasolinera. Allí, intercambió disparos con los agentes antes de ser abatido.
El policía fallecido estaba bajo investigación interna y le habían retirado su arma. Además, se encontraba de baja psicológica y tenía limitaciones psicofísicas que lo habían llevado a pasar a segunda actividad.
Las autoridades han declarado que la investigación sobre los sucesos es confidencial, pero aseguran que ninguno de los agentes de la Guardia Civil involucrados resultó herido.
