Ciberdelincuencia

Detenido en Rumanía un importante ciberdelincuente murciano denunciado más de 300 veces

El varón murciano era el líder de una organización criminal que se dedicaba a estafar en internet a través de diferentes métodos 
Detenido en Rumanía por la Guardia Civil y la Policía Local
Detenido en Rumanía por la Guardia Civil y la Policía Local

La Policía Nacional, en colaboración con la Guardia Civil, ha desarticulado una organización criminal dedicada a realizar estafas a través de internet en todo el territorio nacional y cuyo líder era un hombre natural de Murcia. Se trata de una operación conjunta llamada 'Kalinka-Tirano'

Al parecer, estos ciberdelincuentes se dedicaban a secuestrar cuentas personales de WhatsApp, algo que fue denunciado en agosto de 2021 por cinco personas a la Guardia Civil. Del mismo modo y sobre las mismas fechas, se personaron ocho personas en la comisaría de Policía Nacional, denunciando hechos con idéntico modus operandi.

Ante el incremento de estas denuncias, se hizo necesaria la coordinación de ambos cuerpos policiales para desarrollar una investigación conjunta. Fruto de la  investigación, se llegó a la conclusión de que eran cometidas por un grupo perfectamente organizado y cuyo líder era murciano.

Todo tipo de ciberestafas

Durante la investigación, se han llegado a contabilizar más de 300 denuncias en todo el territorio nacional por diferentes tipologías de estafas como la suplantación mediante secuestro de cuentas de WhatsApp y solicitud de dinero a contactos, estafa de alquileres vacacionales, contratación de micro préstamos fraudulentos a nombre de terceros, apertura de cuentas bancarias usurpando la identidad de terceros, phishing (método para obtener claves bancarias y otra información confidencial haciéndose pasar por una institución de confianza en un mensaje de correo electrónico), smishing (ataque de ingeniería social que utiliza mensajes de texto móviles falsos para engañar a las personas para que descarguen programas maliciosos, compartan información confidencial o envíen dinero a los cibercriminales) e “hijo en apuros” (remisión de mensajes por aplicaciones de mensajería en  los que se hacen pasar por los hijos de las víctimas solicitando dinero de manera urgente para cubrir una supuesta emergencia).

Detención y registro en Bucarest

Gracias a la investigación, se llegó a identificar a cinco miembros de la organización en las provincias de Murcia, Málaga, Alicante y Tenerife, investigando a cuatro de ellos y pudiendo determinar que el líder de la misma, autor principal y destinatario final del dinero, pudiendo averiguar que desde hace varios años se encontraba huido en Rumanía, desde donde perpetraba su actividad delictiva. Debido a ello, se solicitó colaboración con la policía de ese país para su localización, dando resultado positivo y siendo ubicado en un domicilio en los extrarradios de Bucarest, donde finalmente se le detuvo.

El líder de la trama tenía una impresora industrial para la impresión de documentos de identidad en soporte físico, los cuales empleaba para la apertura telemática de cuentas bancarias con identidades usurpadas o falsas, utilizando las mismas para la obtención y el blanqueo del dinero obtenido fraudulentamente, el cual posteriormente empleaba en la compra de criptomonedas.

De la investigación llevada cabo hasta la fecha han aflorado más de 55 identidades usurpadas con cientos de cuentas bancarias abiertas con las mismas, habiendo detectado hasta la fecha movimientos por más de 10 millones de euros.

Una estación de minado de criptomonedas en el domicilio

La operación culminó hecho con un registro en el domicilio del ciudadano español residente en Rumanía efectuado por los agentes españoles con el apoyo de la policía rumana, procediendo posteriormente a su detención y puesta a disposición de las autoridades judiciales rumanas, que ejecutaron la extradición del detenido a España, ingresando directamente en prisión para su puesta a disposición del Juzgado de Pamplona.

En el registro practicado en el domicilio del Bucarest, se intervino una estación de minado de criptomonedas, dos ordenadores portátiles, discos duros de una CPU de sobremesa, varias tarjetas bancarias fraudulentas, una impresora industrial especial para la impresión de tarjetas, 55 documentos nacionales de identidad españoles falsificados, así como cientos de soportes de tarjeta para su impresión.