Los cuatro cadáveres pertenecientes a una mujer y tres hombres que fueron encontrados en una vivienda del Casco de Toledo a última hora de la tarde de este martes no presentan signos de violencia.
Distintas fuentes de la investigación apuntan a una intoxicación que podría deberse a un escape de gas o de monóxido de carbono, si bien se sigue trabajando para esclarecer los hechos.
Pasadas las 00:30 horas de este miércoles se ha levantado el último de los cuatro cadáveres de esta vivienda de la Cuesta de Santa Leocadia. El último de los cuerpos corresponde a una mujer que llevaba varios días fallecida.
Las primeras versiones recabadas del personal que ha atendido la urgencia apuntan a que este cadáver estaba en avanzado estado de descomposición, y podría corresponder a una persona de en torno a 60 años.
Además, en el piso donde han aparecido los cadáveres no hay desorden aparente. Los médicos forenses han trabajado en la zona, acompañados del despliegue de la policía local.
Los cuatro cadáveres estaban repartidos uno en una habitación, otro en una segunda estancia y los otros dos juntos en el mismo habitáculo.