TRIBUNALES

Los acusados de asesinar un hombre en Mula en 2019 reconocen los hechos y culpan a la droga

Tras la confesión, la Fiscalía ha rebajado la petición de penas a 10 años de prisión para cada uno de los tres acusados por el delito de asesinato; 18 meses por el de tentativa de robo con violencia; y 4 meses por el de tenencia ilícita de armas
Acusados en la muerte del Perete en Yéchar frente al juez (foto: La 7)
Acusados en la muerte del Perete en Yéchar frente al juez (foto: La 7)

Los tres acusados de asesinar con una carabina a un hombre en abril de 2019 tras irrumpir de madrugada en su domicilio, en la pedanía de Yéchar, en Mula, con la intención de robarle el dinero y las plantas de marihuana que guardaba en una vivienda próxima, han reconocido los hechos ante un jurado popular en la primera sesión del juicio, que se desarrolla en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial.

Ataviados con mascarillas, que han tenido que retirarse durante la declaración a petición del juez, los procesados han confesado que eran consumidores de sustancias estupefacientes en el momento del asesinato, que acudieron a la vivienda con la intención de robar y que, ante la negativa del propietario de darles el dinero que guardaba, uno de ellos le disparó. Posteriormente, los tres se marcharon sin llevarse nada.

Los abogados de los procesados -de nacionalidad maliense, marroquí y argelina, todos mayores de edad y con antecedentes penales- han presentado escritos para acreditar la toxicomanía de sus clientes en el momento de los hechos delictivos y han informado a la Sala de que han procedido a indemnizar parcialmente, y dentro de sus posibilidades económicas, a la familia de la víctima, que dejó dos hijas menores tras su fallecimiento.

Por su parte, el abogado de un cuarto individuo, al que se le acusa, en el marco del mismo procedimiento judicial, de ser cómplice del delito de tentativa de robo por mostrar al resto de procesados el lugar en el que el fallecido guardaba las plantas de marihuana horas antes del crimen, ha instado al jurado a juzgar a su cliente teniendo en cuenta que éste "no participó en el asesinato".

REBAJA DE PENAS

La Fiscalía ha introducido modificaciones en su escrito en tanto que los acusados han confesado los hechos e indemnizado parte de la cuantía fijada en concepto de responsabilidad civil, además de haber anunciado su intención de iniciar un plan de pagos dirigido a saldar la deuda al completo. También ha sido decisiva la adicción a las drogas de los cuatro imputados y la concurrencia de dilaciones indebidas en el proceso judicial.

En concreto, ha rebajado la petición de penas a 10 años de prisión para cada uno de los tres acusados por el delito de asesinato; 18 meses por el de tentativa de robo con violencia; y 4 meses por el de tenencia ilícita de armas. En el caso del cuarto procesado -de nacionalidad española-, la pena se ha reducido a los 9 meses de cárcel.

A la indemnización, por su parte, le ha añadido la cantidad de 80.000 € para la pareja de la víctima, que estuvo presente en el asesinato, y de 3.000 € para la madre. Estos montantes se suman a los 360.000 € que solicita para las dos hijas del fallecido.

Los letrados se han adherido de forma íntegra a las conclusiones del Ministerio Público.

Durante su último alegato, los cuatro encausados han coincidido en pedir "perdón" a la familia de la víctima y a la Sala y mostrarse "muy arrepentidos" por los hechos.

El juicio continuará este martes, a partir de las 10.00 horas, con la lectura del objeto del veredicto del magistrado y la deliberación del jurado.

RELACIÓN DE HECHOS

Los hechos tuvieron lugar en abril de 2019, cuando los tres encausados, junto a dos personas más, una de ellas no identificada y la otra en paradero desconocido, se desplazaron sobre las 2.00 horas hasta la vivienda de la víctima a sabiendas de que ésta guardaba en un lugar muy próximo una plantación de marihuana. Los tres conocían de la existencia de estos cultivos por un cuarto sospechoso, quien, un día antes, por la tarde, les había mostrado el lugar exacto en el que el finado tenía escondidas las plantas de marihuana.

Con todo, los individuos acudieron de madrugada en dos vehículos, ambos robados, uno en Los Alcázares y el otro en Lucena (Córdoba), con el objetivo de llevar a cabo lo que en el argot policial se conoce como 'vuelco', esto es, robar droga. En el techo de uno los coches colocaron un rotativo de luz azul similar a los que utiliza la Policía Nacional en caso de emergencia.

Todos los actuantes iban provistos de guantes y pasamontañas para evitar ser identificados, y transportaban armas robadas, para las que carecían de permiso, que estaban cargadas y listadas para ser detonadas.

A su llegada, uno de ellos cogió una maza de grandes dimensiones y golpeó la puerta de la casa donde se hallaban las plantas, mientras que el resto comenzó a aporrear la del domicilio del afectado al grito de "¡Guardia Civil!".

Al abrir la puerta la víctima en presencia de su pareja sentimental, uno de los acusados le exigió que le diese el dinero que guardaba. Ante la negativa del agredido, uno de los sospechosos le disparó, presuntamente, una bala desde una carabina que le penetró en el hemitórax derecho, causándole la muerte "momentos después".

El escrito de calificación fiscal apunta que, en el momento del impacto del proyectil, la víctima "se encontraba alrededor de un metro por debajo de su agresor, de tal forma que estaba totalmente indefenso y a su merced".

Tras los disparos, los acusados se marcharon del lugar sin llevarse las plantas de marihuana, ni el dinero que el fallecido tenía en su domicilio -unos 4.350 €-.

Los vehículos usados por los agresores fueron localizados al día siguiente, uno de ellos en Alguazas y el otro Cúllar (Granada), totalmente calcinado. Además, la escopeta y parte de una carabina fueron localizadas un año después por indicación de uno de los acusados en un paraje de la pedanía murciana de Los Dolores.