La delegada del Gobierno en la Región de Murcia, Mariola Guevara, y la jefa Provincial de Tráfico, Virginia Jerez, han entregado este lunes 855 test a las policías locales de 13 municipios para el control del consumo de drogas durante la conducción en el ámbito urbano.
Entrega en 13 municipios
En concreto, los municipios son Alguazas (25 unidades), Alhama (50 unidades) Archena (125 unidades), Beniel (25 unidades), Blanca (25 unidades), Cartagena (60 unidades), Moratalla (50 unidades), Mula (25 unidades), Murcia (200 unidades), San Javier (30 unidades), San Pedro (100 unidades), Santomera (40 unidades) y Mazarrón (100 unidades). Los test, junto a las entregas desde 2016, suman una dotación de 3.660 unidades, según informaron fuentes de la Delegación del Gobierno en un comunicado.
El objetivo es "reducir el consumo de drogas al volante aportando medios de control a los agentes encargados de la vigilancia del tráfico en vías urbanas, ya que el tratamiento de estas conductas de riesgo necesita de un enfoque integral y cooperación entre las distintas administraciones".
La Estrategia Española de Seguridad Vial 2030 identifica como un área estratégica la "tolerancia cero con los comportamientos de mayor riesgo", en consonancia con el enfoque del sistema seguro integrado y de acuerdo con los parámetros de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. En ese sentido, la Delegación ha apuntado que "aumentar el impacto de la vigilancia mediante una mejor planificación y potenciar la vigilancia de las conductas de mayor riesgo mediante la aplicación de las nuevas tecnologías son líneas de actuación prioritarias".
En la programación anual de la Dirección General de Tráfico (DGT) de 2024 se han incluido dos campañas destinadas a la vigilancia y control del consumo de alcohol y drogas en vías urbanas e interurbanas. La segunda tendrá lugar entre los días 16 y 22 de diciembre, mientras que la primera se llevó a cabo durante la semana del 19 de agosto. En esta última, se realizaron un total de 289 pruebas de drogas.
Del total de pruebas realizadas, 119 se realizaron en vías urbanas por policía locales de los municipios de la Región adheridos a la campaña interponiéndose 17 denuncias (14%) y 170 se realizaron por Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (ATGC), resultando positivas 73 (43%).
En la misma campaña también se llevaron a cabo 10.595 pruebas de detección de alcohol, 7.640 en vías interurbanas por la Benemérita, de las que resultaron positivas 117 (1,53%), y 2.955 en vías urbanas por policías locales, con un total de 78 positivos (2,6%).
La realización de estos controles no es puntual durante las campañas, sino que los agentes encargados de la vigilancia y control del tráfico realizan estas pruebas de detección de consumo en distintos puntos de verificación a lo largo de todo el año, y así, en vías interurbanas, en 2023 se realizaron 164.880 pruebas de alcohol, resultando positivas 2.398 (1,45%), y 3.444 pruebas de drogas, de las que el 47,68% fueron positivas.
Durante el transcurso de 2024, en los controles preventivos se han realizado por la ATGC un total de 135.642 pruebas de alcoholemia en vías interurbanas, con el resultado de 1.752 positivas, lo que supone el 1,29% del total. En cuanto a las drogas se han realizado por la ATGC un total de 2.267 pruebas con el resultado de 1.072 positivas, lo que supone el 47,28% del total.
TEST DE DETECCIÓN DE DROGAS
La detección de drogas consta de la toma de dos muestras de saliva. La primera de ellas será utilizada para un diagnóstico cualitativo 'in situ' de presencia de drogas utilizando los kits de drogas cedidos. Se pueden detectar estas cinco sustancias: anfetaminas, metanfetaminas, opiáceos, cocaína y cannabis.
Se retirará la cubierta del test y se entregará el casete a la persona que se vaya a analizar, la cual debe introducírselo en la boca y mover el colector dentro hasta que el indicador se ponga azul. A continuación se introducirá el casete de prueba y el cartucho en el analizador.
El análisis comenzará automáticamente y tras unos minutos, se mostrará el resultado, que de ser positivo daría lugar a una segunda prueba con fines evidenciales de determinación y cuantificación a realizar en un laboratorio homologado. El conductor que dé positivo no podrá volver a ponerse al volante de su coche y podrá solicitar que se realice un análisis de sangre como prueba de contraste. La extracción se realizaría por personal sanitario en un centro hospitalario o de salud.