CALOR Y SEQUÍA

El Gobierno prohibirá este jueves trabajar en episodios de fuerte calor

se establecerá la obligación de reducir la jornada laboral y cambiar horarios cuando se den estos avisos por parte de la Agencia.
Se prohíbe trabajar en episodios de calor
Se prohíbe trabajar en episodios de calor

El Gobierno ha convocado para este jueves una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros en el que se tratarán las consecuencias de la sequía y el calor y medidas para contrarrestarlos. En ese paquete de medidas se incluye la prohibición de que los trabajadores desempeñen actividades bajo el sol en episodios de calor extremo, es decir, cuando la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) lance una alerta roja o naranja.

Según informa la Cadena Ser, las actividades laborales que se verán interrumpidas por las temperaturas extremas serán sobre todo tareas como limpieza o recogidas de residuos. Además, también se establecerá la obligación de reducir la jornada laboral y cambiar horarios cuando se den estos avisos por parte de la Agencia.

Otro de los puntos que se pretende aprobar este jueves es que las empresas deberán adoptar diferentes medidas para proteger a los trabajadores durante estos episodios de calor, como el uso de ropas ligeras y similares.

MEDIDAS POR LA SEQUÍA

Así lo ha comunicado este miércoles Moncloa, que ha precisado que va a estar centrado en "abordar un conjunto de medidas con el que seguir afrontando las consecuencias de la sequía en España". La falta de lluvia en España sigue mermando la reserva de los embalses, que esta semana han perdido 406 hectómetros cúbicos, lo que representa el 0,7%, según ha informado esta semana el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, que señala que en estos momentos los embalses guardan 27.417 hectómetros cúbicos, por lo que están al 48,9% de su capacidad total.

Así, en este momento, 2023 es el quinto año con menos agua almacenada en los embalses desde que hay registros. En la semana 19 de 1994 los embalses estaban prácticamente como en este momento, al 48,39% de su capacidad; un año antes, en 1993, al 44,58%; e incluso, en 1992 se situaban en el 46,48% de su capacidad total. Fueron esos cuatro años, de 1992 a 1995 los años con menos agua reservada desde que hay registros.