Por fin pudieron disfrutar los aficionados del UCAM Murcia de una victoria de su equipo en casa en la Liga Endesa. Tras un inicio dubitativo esta temporada, los de Sito Alonso parecen encontrar el camino. Lo hicieron en un partido tremendamente entretenido, donde los ataques vencieron a las defensas. Uno de esos encuentros que gustan más a los aficionados que a los entrenadores.
El encuentro tuvo un nombre destacado: Travis Trice. El norteamericano, nuevo fichaje de esta temporada, se deshizo por completo de las malas sensaciones de los primeros encuentros con una exhibición anotadora. 31 puntos que sirvieron para guiar a los de Sito Alonso al triunfo. Gran partido también de dos pesos pesados del vestuario: Nemanja Radovic (18p) y el capitán, Sadiel Rojas, que vuelve a demostrar por qué es un ídolo para toda la afición pimentonera (11 rebotes, 23 valoración).
El choque no comenzó bien para los locales. El talentoso base nacional Dani Pérez campaba a sus anchas y dirigía al conjunto manresano, que se llegó a poner en 6-14 en los primeros compases del partido. Sito Alonso movió el banco y cambió el rumbo del partido, que se igualó a finales del primer período gracias a dos triples del tirador por antonomasia del UCAM, Thad McFadden.
La intensidad y el acierto del conjunto murciano se impuso al inicio del segundo cuarto, llegando a liderar el marcador con una máxima ventaja en ese momento de 8 puntos (39-31). Pedro Martínez, experimentadísimo en los banquillos de la ACB, supo corregir errores y devolver la igualdad al marcador de la mano de Harding, llegando al descanso con un marcador de 47-46.
La segunda mitad fue otra película. Los problemas de faltas personales hicieron mucho daño al BAXI Manresa, teniendo que sacar de la pista a su director de orquesta, Dani Pérez, y Trice comenzaba a ser un dolor de muelas para la defensa catalana. El palacio empujaba, todo entraba y el equipo que vestía de blanco se empequeñecía cada vez más. Desde el tercer cuarto, el UCAM fue el dueño del partido, siempre con ventaja, a veces mayor y a veces menor, frente a un Manresa que solo conseguía hacer la goma.
El encuentro terminó de romperse en el último período, con Trice desatado y un BAXI que, a pesar de un leve arreón a mediados de cuarto, no pudo frenar el vendaval murciano. 96-81 fue el resultado final, un tanto injusto para lo que se vio en cancha, pues a pesar de la superioridad de los de Sito Alonso, el equipo manresano ofreció pelea durante todo el encuentro a pesar de desinflarse en los compases finales.
