Una vez más, los regantes ven cómo el Ministerio de Transición Ecológica les da un bofetón, quizá el más grave, y les pone al borde de la ruina.
A pesar de que Ximo Puig y José Vélez anunciaron que habían logrado frenar las intenciones iniciales de Teresa Ribera y que por tanto habría algo más de oxígeno en los plazos para los regantes, la ministra finalmente ha ignorado dicho acuerdo y ha acelerado todo lo posible el recorte al trasvase eliminando el escalonamiento de los caudales ecológicos.
Además, los regantes han conocido el fin de las subvenciones a la desalación, por lo que se triplica el precio del agua de esta procedencia, dejándoles también sin 'plan B'.
Ante todo esto, los regantes convocan a toda la sociedad a manifestarse en Madrid el próximo día 11 de enero para protestar por la decisión. "Nunca hasta ahora hs dio tan necesario y nunca una ministra lo ha merecido más", asegura Lucas Jiménez, presidente del Sindicato Central de Regantes.