Sobre las ocho de la mañana, desde la estación de FEVE en Cartagena emprendían marcha Joaquín y Julia. Padre e hija, son dos de los protagonistas del reto solidario ‘Mar y Tierra’ celebrado este sábado para dar visibilidad a la discapacidad y recaudar fondos para Zancadas sobre Ruedas.
Acompañados de una veintena de personas, iniciaban desde Cartagena su particular aventura, recorrer los 30 kilómetros de distancia que separan Cartagena de Cabo de Palos. Joaquin, padre de Julia, una niña con discapacidad, realizaba el recorrido empujando la silla de ruedas especial de su hija, y de forma paralela, el cartagenero Francisco Segura, iniciaba la otra parte del reto, nadar 10 kilómetros desde Cala Fría, en Cabo de Palos, hasta Islas Hormigas y regreso al punto de partida.
Ha sido precisamente en este enclave de la costa cartagenera donde Joaquín y Julia, tras completar el recorrido, esperaban la llegada de Francisco fundiéndose en un emotivo abrazo cargado de solidaridad, esfuerzo y lucha para dar visibilidad a la discapacidad.
El reto no ha sido fácil para ninguno de los dos. A la llegada a meta, Joaquín Susmozas ha explicado que se han encontrado con tramos muy complicados por el barro acumulado tras las lluvias del fin de semana, y ha añadido que, pese a las dificultades, “ha sido muy emocionante. Ha habido momentos de todo, de risas, música y emoción por el ánimo de la gente siendo difícil contener las lágrimas”.
Por mar el reto tampoco ha sido fácil. Francisco Segura ha asegurado que la ida hacia Islas Hormigas ha sido “muy dura” por el viento de levante y la corriente en la reserva marina. Ha afirmado que la travesía ha sido “el colofón a ocho meses de preparación y una satisfacción para dar visibilidad a la discapacidad”.
En el mismo sentido hablaba Joaquin, asegurando que “entre todos debemos hacer que la gente que no tiene discapacidad entienda las dificultades de las familias que tienen a una persona en casa con discapacidad”.
Repsol, en el marco de su compromiso con el entorno, ha colaborado con este reto solidario con una aportación de 3.000 euros para que Zancadas sore Ruedas pueda adquirir nuevo material y continuar realizando su labor social que pasa, según su presidenta, Teresa Rodríguez, por “cumplir sueños a través del deporte, derribar las barreras de la discapacidad y acompañar a las personas que con sus propios medios no pueden disfrutar de su tiempo libre y del ocio”.
